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La transformación digital en el sector público

Jason Adolf, Industry Vice President - Global Public Sector
October 15, 2018

En la película de 2010 "La red social", una versión ficticia del empresario tecnológico Sean Parker hace una declaración profunda accidentalmente: "Vivimos en cuevas, luego en ciudades y ahora en Internet". Dejando a un lado las dudas sobre la precisión de esa película, estas palabras sirven como una síntesis bastante adecuada de cómo se han digitalizado muchas facetas de la vida moderna, aunque están escritas con los beneficios de la licencia poética y la retrospectiva.

El auge de la computación en la nube y la interconexión facilitada por el Internet of Things enfatizan aún más la transformación digital que ha afectado a todos los aspectos de la existencia humana.

El gobierno está entrando de forma lenta, pero segura, en una era de transformación digital.

Por lo tanto, era inevitable que la transformación digital llegara al sector público. Al mismo tiempo, no es particularmente sorprendente que esto ocurriera a un ritmo más lento que en las empresas privadas y en los hogares, dado que la mayoría de los movimientos que realiza un departamento gubernamental (en cualquier nivel) está sujeta a varios controles, balances, aprobaciones y revisiones. Pero la ola de este amplio desarrollo de TI continúa, aún no se acerca a su punto más alto ni está próxima a romper. Una serie de tendencias específicas representan los factores más importantes en la transformación digital del sector público, y las examinaremos aquí más adelante. Estos entornos podrían ser óptimos para el uso de plataformas de desarrollo de aplicaciones.

La modernización general

A pesar de las infraestructuras tecnológicas, numerosos gobiernos siguen dependiendo de hardware y software heredado, y corregir esto ya no es simplemente una prioridad en EE. UU., sino un mandato legal desde que el presidente Trump firmó la Ley de modernización de la tecnología del Gobierno (Modernizing Government Technology Act) en diciembre de 2017, según FedScoop. Los CIO y los CTO de las agencias federales estadounidenses ahora tienen el estímulo y el presupuesto para realizar actualizaciones vitales cuando sea necesario. Otras naciones habían comenzado este proceso antes de que lo hicieran los EE. UU. o lo han comenzado a hacer después. Estos ajustes a nivel básico pueden proporcionar el marco para el desarrollo de herramientas públicas digitales más completas.

El aumento de la expansión del IoT

Un análisis de Gartner señaló un aumento del 31 por ciento en el número de "cosas" conectadas al IoT general entre 2016 y 2017, e indicó que 8400 millones de ordenadores, dispositivos y otros objetos (desde termostatos domésticos hasta sistemas de automóviles) formarían parte de la red mundial para finales de 2017. La firma de investigación cree que la mayoría de estos objetos (alrededor del 63 por ciento, o 5200 millones) son artículos de consumo, y los 3100 millones restantes están destinados a uso comercial.

La transformación digital en el sector público podría crear ciudades inteligentes"Las ciudades inteligentes" y otros proyectos cívicos que incorporan el Internet of Things son ejemplos importantes de la transformación digital pública.

De acuerdo con estas predicciones, tan solo alrededor de 100 millones de dispositivos y otros productos en la esfera global del IoT operan dentro del sector público. Pero este número no es tan pequeño como parece si se tiene en cuenta la cantidad de trabajadores del gobierno, de ciudadanos y de empresas privadas, y es muy probable que la cifra ya haya aumentado. La aparición de "ciudades inteligentes", en las cuales elementos comunes pero esenciales (como las farolas, las cámaras de tráfico, los vehículos policiales, etc.) pueden enviar y recibir datos instantáneamente a través de la interfaz con una plataforma de nube pública para mejorar diversos servicios civiles, refuerza aún más la probabilidad de una mayor participación del sector público con las herramientas de IoT.

Amsterdam sigue siendo el ejemplo más notable de un proyecto de ciudad inteligente, ya que ha ido incorporando gradualmente la funcionalidad interconectada durante los últimos nueve años. El estudio de caso de 2016 de la revista MIT Sloan Management Review sobre la iniciativa de esta ciudad de los Países Bajos descubrió que, aunque no carecía de dificultades y defectos, representaba un gran avance para facilitar la vida diaria de las personas con la tecnología pública. Los resultados son lo suficientemente positivos como para garantizar que otras ciudades puedan moverse en una dirección similar. TechTarget citó Kansas City, Singapur, Dubái y Barcelona como áreas metropolitanas prominentes que habían adoptado tales tecnologías en diversos grados.

Creación de oportunidades de conveniencia a través de la IA

La inteligencia artificial ya no es un tema de ficción especulativa, sino una realidad bastante común de muchas maneras diferentes. Según Deloitte, la incorporación de iniciativas de IA en el sector público podría suponer una oportunidad de ahorro de dinero y de eficiencia demasiado grande para que los gobiernos la ignoren o la pospongan. Si se implementa en una escala considerable durante los próximos cinco a siete años, la automatización podría ahorrarle al gobierno de EE. UU. 37 mil millones de dólares y 1100 millones de horas de productividad de personal al año.

Los gobiernos podrían ahorrar decenas de miles de millones cada año al implementar una mayor automatización en todas sus agencias.

Incluso en un contexto donde los presupuestos (y los déficits) a veces se miden en billones, esas cifras son considerables. De acuerdo con el informe de Deloitte, si la automatización del sector público solo se implementara en una escala menor, por ejemplo, con la automatización de tareas que ya se realizan con ordenadores, el gobierno podría eliminar 266 millones de horas de trabajo anuales y ahorrar 9600 millones de dólares al año.

Aunque puede haber cierta inquietud con respecto a la posible pérdida de trabajo humano, la probabilidad de que esto ocurra en un futuro inmediato es mínima. Aunque el 30 por ciento de la fuerza laboral del gobierno federal podría ver eliminadas sus responsabilidades laborales, esos trabajadores no serían retirados automáticamente, sino que tendrían la libertad de administrar tareas esenciales que la IA no puede y no podrá asumir hasta que se realicen avances importantes.

Mayor libertad a través de la movilidad

En 2015, el IDC estimó que el 72,3 por ciento de toda la fuerza laboral estadounidense sería móvil para 2020, capaz de atender todas las funciones laborales principales independientemente de su ubicación. No hay ninguna razón por la cual los miembros del gobierno no puedan formar parte de ese grupo preparado para ser móvil, si no ahora, en los próximos años.

Las aplicaciones de alto rendimiento que funcionan sin problemas en teléfonos inteligentes y tabletas sin perder la funcionalidad en sus iteraciones de escritorio serán esenciales para que los trabajadores del gobierno aprovechen al máximo el potencial que puede aportar la movilidad. Y si bien los presupuestos de TI para los departamentos gubernamentales están aumentando (como se ha señalado anteriormente), esto no garantiza que las agencias puedan asumir los costos del desarrollo de aplicaciones personalizadas, puesto que hay que tener en cuenta que el desarrollo de principio a fin de una sola aplicación puede costar hasta 500000 dólares.

Aquí es donde Appian entra en juego. Al utilizar nuestra plataforma de entrega de aplicaciones, los empleados de tecnología a nivel municipal, estatal y federal obtendrán la capacidad de crear e implementar aplicaciones versátiles a un ritmo vertiginoso, hasta 10 veces más rápido que con los sistemas comparables. Pero no solo eso: los requisitos de low-code de la solución de Appian implican que el personal de TI del gobierno no tendrá que perder tiempo en la construcción, en pruebas y en el control de calidad del código línea por línea.

Además, los empleados tendrán la confianza de que las aplicaciones que crean funcionan como deberían en todos los canales y en todo momento. Y por último, las aplicaciones pueden satisfacer las demandas de los servicios utilizados por el público en general (bibliotecas, portales educativos, registro y regulación de vehículos motorizados, etc.) e incrementar la interacción con el gobierno local al saber que el sistema funcionará sin problemas para las personas.

Visite nuestro Centro de recursos del sector público para obtener más información.La digitalización del Gobierno federal